¿A quién no le ha pasado entrar al baño y notar que los azulejos ya no tienen ese brillo de antes? Es frustrante, ¿verdad? Con el tiempo, el vapor, la cal y los restos de jabón se acumulan, dejando una capa opaca difícil de ignorar. Pero la buena noticia es que con nuestros consejos y un poco de constancia, podrás mantenerlos impecables. ¡Vamos a ello!
¿Por qué se ensucian tanto los azulejos del baño?
La clave del problema está en la humedad constante que se genera cada vez que usamos el baño. Entre el vapor de la ducha, los restos de productos de higiene y el agua dura que deja cal, los azulejos se convierten en el escenario perfecto para la suciedad.
Si a esto le sumamos el moho, que aparece cuando no hay una buena ventilación, es fácil de entender por qué el baño se convierte en un lugar complicado de mantener limpio. Pero no te agobies, es cuestión de seguir unos pasos básicos y adoptar algunas rutinas de limpieza para evitar que la suciedad se acumule.
Cómo limpiar los azulejos del baño paso a paso
Antes de empezar, asegúrate de tener a mano todo lo que se necesita. Así evitarás tener que parar a mitad del proceso para buscar algo.
Materiales y productos que necesitas antes de empezar
- Un cubo con agua caliente
- Vinagre blanco (salvavidas para cualquier limpieza)
- Bicarbonato de sodio
- Jabón neutro o un limpiador multiusos
- Un cepillo pequeño o un viejo cepillo de dientes para las juntas.
- Un paño de microfibra o una esponja suave.