Día Nacional de la Lengua de Señas: una herramienta para la inclusión
Cada 14 de junio se celebra en España el Día Nacional de la Lengua de Señas, una fecha que nos invita a reconocer y visibilizar esta forma de comunicación como un derecho, una identidad cultural y, sobre todo, una herramienta esencial para la inclusión social.
Desde Más Social, como Centro Especial de Empleo comprometido con la igualdad de oportunidades, queremos sumarnos a esta conmemoración destacando la importancia de la lengua de señas como puente hacia una sociedad más accesible y respetuosa con la diversidad.
La lengua de señas: una forma plena de comunicación
La lengua de señas no es una simple alternativa al habla: es una lengua completa, con su propia gramática, estructura y riqueza cultural. No se trata de una traducción literal del español con las manos; su sintaxis, el uso del espacio, las expresiones faciales y el movimiento corporal forman un sistema lingüístico único y plenamente funcional.
En el mundo existen más de 300 lenguas de signos diferentes. En España, conviven la Lengua de Signos Española (LSE) y la Lengua de Signos Catalana (LSC), cada una con características propias. Al igual que ocurre con las lenguas orales, hay variaciones regionales: una misma palabra puede expresarse con diferentes signos según la zona geográfica, como si existieran “acentos” visuales.
Además, esta lengua permite adaptarse a palabras sin signo específico, como nombres propios, mediante el uso del alfabeto dactilológico, un sistema de deletreo con gestos manuales que facilita la comprensión y personalización en la comunicación.
Para miles de personas sordas o con discapacidad auditiva, la lengua de señas es la vía principal para aprender, trabajar, expresarse y construir relaciones. Sin embargo, no todas las personas sordas signan: algunas utilizan lectura labial, ayudas auditivas o comunicación oral. La lengua de señas es una opción inclusiva y valiosa, no una imposición.
Avances, retos y derechos
En España, un gran paso fue la aprobación en 2007 de la Ley 27/2007, que reconoce oficialmente la lengua de signos española y promueve su uso en entornos como la educación, los medios de comunicación, la atención sanitaria y los servicios públicos. Gracias a este reconocimiento, la presencia de intérpretes en telediarios, actos oficiales o eventos públicos se ha convertido en una herramienta fundamental para garantizar la accesibilidad.
No obstante, persisten barreras que limitan la plena inclusión de las personas sordas. La falta de intérpretes en servicios esenciales, la escasa formación en accesibilidad o la invisibilización de esta lengua en medios digitales siguen siendo desafíos pendientes.
Además de ser un derecho, la lengua de señas es una forma de expresión artística. Poesía visual, teatro signado, cuentacuentos e incluso espectáculos de humor enriquecen la cultura desde una perspectiva visual. La inclusión también pasa por abrir espacios a la dimensión creativa.
Lo que podemos hacer como sociedad
La inclusión lingüística comienza en los pequeños gestos. Aprender algunas señas básicas como “hola”, “gracias” o “¿cómo estás?” puede marcar una gran diferencia en la vida de alguien. La formación en accesibilidad y lengua de signos en empresas, centros educativos y administraciones públicas es una herramienta poderosa para generar entornos más inclusivos.
También es importante dar visibilidad a las personas sordas y a los intérpretes en medios, eventos y espacios públicos. Promover contenidos accesibles, con subtítulos e interpretación en lengua de señas, contribuye a que la información llegue a todos en igualdad de condiciones.
Incorporar esta lengua a nuestra vida cotidiana no solo favorece la inclusión, sino que también estimula nuestras propias capacidades. Diversos estudios demuestran que su aprendizaje mejora la memoria, la atención y la percepción espacial, incluso en personas oyentes.
En Más Social, la comunicación es de todos
En Más Social creemos que una sociedad inclusiva empieza por escuchar y por aprender a comunicarse de diferentes maneras. Apostamos por la diversidad no solo en lo que hacemos, sino también en cómo lo hacemos.
Reivindicar la lengua de señas es una forma de construir igualdad desde lo más básico: permitir que todas las personas puedan ser entendidas, sin importar cómo se comuniquen.
Conclusión
El Día Nacional de la Lengua de Señas no es solo una fecha conmemorativa: es un recordatorio de que la verdadera inclusión comienza con el reconocimiento del otro, de su voz y de su forma de expresarse.
Desde Más Social, te invitamos a que este día sea un punto de partida para aprender, empatizar y actuar. Porque cuando eliminamos barreras en la comunicación, abrimos puertas a un mundo donde todos y todas podamos participar en igualdad.
